Monumento al príncipe Karl Egon II. de Fürstenberg en Křivoklát.

Bajo Karl Egon II. de Fürstenberg, Křivoklátsko alcanzó la cima de su prosperidad. El príncipe se benefició hábilmente de la riqueza natural de su propiedad -especialmente las enormes reservas de madera en los bosques locales y los ricos yacimientos de mineral de hierro- que le permitieron, entre otras cosas, ampliar la propiedad para incluir varios pueblos, construir una red de carreteras de alta calidad y, por último, pero no menos importante, invertir en la costosa restauración del castillo destruido por el fuego...